Oscuridad, fuego y disparos para recordar el crimen 80 años después
Los Sucesos de Casas Viejas conmocionan al numeroso público que asiste en Benalup a la recreación en las calles del pueblo
REDACCIÓN CÁDIZ | ACTUALIZADO 13.01.2013 - 05:01
Oscuridad, fuego, disparos..., la muerte y el quejío inconsolable. La recreación en los principales lugares donde se desarrollaron los Sucesos de Casas Viejas conmocionó ayer y la noche del viernes al numeroso público que se congregó en las calles del centro de Benalup-Casas Viejas.
En buena parte de los cuatro escenarios donde se lleva a cabo la recreación, las calles están a oscuras o con una escasa luz, una penumbra que ayuda al público a situarse en unos lugares donde hace 80 años, entre los días 11 y 12 se enero se cometió una masacre que acabó con la vida de más de una veintena de vecinos, marcó a fuego a todo un pueblo y se convirtió en uno de los episodios más negros de la historia de España.
Recrear lo que ocurrió hace 80 años en torno a la sede de la CNT, el cuartel de la Guardia Civil, la choza de los Seisdedos y el antiguo cementerio desde el "respeto y el rigor" ha sido, según María Orellana, directora del grupo teatral El Hijo de la Luna, el reto que se marcaron hace unos meses cuando se puso en marcha la idea de representar lo ocurrido en enero de 1933 en los lugares del pueblo donde se desarrollaron. En torno a medio centenar de personas participan en esta recreación, muchas de ellas con la experiencia de haber tomado parte de la representación teatral que se organizó con motivo del 75º aniversario. El vestuario y el atrezo, incluidas las armas de la época, se han tomado de aquel montaje teatral.
La recreación se inicia en la plaza del antiguo Ayuntamiento, en el lugar que en su día era sede de la CNT. Desde ese momento, la acción va transcurriendo con la tensión y la crueldad con la que se desarrollaron los Sucesos.
En la noche estrellada del viernes, las escenas se suceden hasta llegar a la choza de Seisdedos, en la calle Nueva, donde se desencadena la masacre por orden del capitán de la Guardia de Asalto Manuel Rojas.
Los protagonistas de esta recreación, aficionados al teatro, dan lo mejor de sí mismos en sus interpretaciones mientras el fuego y la letanía de disparos van calando entre el público, silencioso y respetuoso ante el drama escenificado al que asisten, conscientes de que hace 80 años la sangre derramada era de personas inocentes.
En la parte final de la recreación, en el lugar del antiguo cementerio y hoy plaza de la calle Manuel Sánchez, la escena transcurre sin apenas iluminación, con el sonido constante de un yunque mientras Antonio de Antonia y Antonio de Paqui, padre e hijo, interpretan cantes relacionados con los Sucesos. Jesús Vela, que en la escena de la choza, interpreta varias piezas con una viola, vuelve en esta parte final a actuar al piano con un requiem que ha compuesto para la ocasión.
La interpretación final de las madres y mujeres de quienes fueron asesinados sobrecoge por los lamentos y pone el broche final a la recreación histórica.
Hoy habrá una nueva sesión. El acceso a los escenarios está limitado y las personas interesadas deben retirar las invitaciones en la Casa de la Cultura en horario de diez de la mañana a una de la tarde y de seis a ocho.
En buena parte de los cuatro escenarios donde se lleva a cabo la recreación, las calles están a oscuras o con una escasa luz, una penumbra que ayuda al público a situarse en unos lugares donde hace 80 años, entre los días 11 y 12 se enero se cometió una masacre que acabó con la vida de más de una veintena de vecinos, marcó a fuego a todo un pueblo y se convirtió en uno de los episodios más negros de la historia de España.
Recrear lo que ocurrió hace 80 años en torno a la sede de la CNT, el cuartel de la Guardia Civil, la choza de los Seisdedos y el antiguo cementerio desde el "respeto y el rigor" ha sido, según María Orellana, directora del grupo teatral El Hijo de la Luna, el reto que se marcaron hace unos meses cuando se puso en marcha la idea de representar lo ocurrido en enero de 1933 en los lugares del pueblo donde se desarrollaron. En torno a medio centenar de personas participan en esta recreación, muchas de ellas con la experiencia de haber tomado parte de la representación teatral que se organizó con motivo del 75º aniversario. El vestuario y el atrezo, incluidas las armas de la época, se han tomado de aquel montaje teatral.
La recreación se inicia en la plaza del antiguo Ayuntamiento, en el lugar que en su día era sede de la CNT. Desde ese momento, la acción va transcurriendo con la tensión y la crueldad con la que se desarrollaron los Sucesos.
En la noche estrellada del viernes, las escenas se suceden hasta llegar a la choza de Seisdedos, en la calle Nueva, donde se desencadena la masacre por orden del capitán de la Guardia de Asalto Manuel Rojas.
Los protagonistas de esta recreación, aficionados al teatro, dan lo mejor de sí mismos en sus interpretaciones mientras el fuego y la letanía de disparos van calando entre el público, silencioso y respetuoso ante el drama escenificado al que asisten, conscientes de que hace 80 años la sangre derramada era de personas inocentes.
En la parte final de la recreación, en el lugar del antiguo cementerio y hoy plaza de la calle Manuel Sánchez, la escena transcurre sin apenas iluminación, con el sonido constante de un yunque mientras Antonio de Antonia y Antonio de Paqui, padre e hijo, interpretan cantes relacionados con los Sucesos. Jesús Vela, que en la escena de la choza, interpreta varias piezas con una viola, vuelve en esta parte final a actuar al piano con un requiem que ha compuesto para la ocasión.
La interpretación final de las madres y mujeres de quienes fueron asesinados sobrecoge por los lamentos y pone el broche final a la recreación histórica.
Hoy habrá una nueva sesión. El acceso a los escenarios está limitado y las personas interesadas deben retirar las invitaciones en la Casa de la Cultura en horario de diez de la mañana a una de la tarde y de seis a ocho.
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